Desde la llegada del Covid-19 los establecimientos públicos de Coquimbo y Andacollo se han valido de diversas estrategias -con el monitoreo y acompañamiento constante del Servicio Local Puerto Cordillera- para resguardar la continuidad de los procesos educativos de los estudiantes. En este contexto, gracias a su modelo educativo basado en la sana convivencia, la escuela Juan Pablo II ha conseguido que más del 85% de los estudiantes de primero básico ya hayan aprendido a leer, pese a no tener clases presenciales.
La directora del establecimiento, Margarita General, comentó que a pesar de la distancia que generó la pandemia, el equipo educativo continuó realizando actividades con los familias para fortalecer el vínculo y hacerlos parte de los aprendizajes de los niños. “Creamos desafíos familiares, donde incluimos la parte pedagógica y la parte valórica con los cuidados que se debían tener en pandemia”, comentó. El trabajo generó importantes resultados ya que según indicó la directora, actualmente los profesores reportan un 100% de asistencia a las clases remotas y “si falta un estudiante el apoderado justifica por qué no pudo conectarse”.
Uno de los logros más relevantes son los resultados de lectoescritura de los estudiantes de primero básico. Según explicó, el Jefe Técnico de la Escuela Juan Pablo II, Rodolfo Ortega “al primero de octubre teníamos sobre el 85% de los niños leyendo, esto es importante porque se trata de una habilidad compleja de generar a distancia”. Margarita General señaló que los apoderados cumplieron un rol importante, ya que han estado apoyando permanentemente a los alumnos, incluso “tenemos videos donde la mamá está cocinando y el niñito le está leyendo al lado”.
Interés internacional
Los logros han despertado interés más allá de las fronteras del país. Recientemente, el Rodolofo Ortega fue invitado a participar en el “XIII Congreso Internacional de Perfeccionamiento e Investigación en Ciencias de la Actividad Física y Salud” organizado por la Universidad de Tarapacá de Arica, para exponer sobre el modelo educativo. El Jefe Técnico comentó que, tras participar en la actividad, “recibí muchos comentarios de docentes de Perú, Venezuela y Colombia a quienes les llamó mucho la atención cómo nosotros le dimos la vuelta al tema de la convivencia y lo incorporamos como elemento para generar buenas interacciones con todos los estamentos y que eso tuviera una incidencia importante en los resultados académicos”.
Hace dos años el equipo educativo realizó una reestructuración del proyecto educativo,, donde según la directora del establecimiento, “dijimos vamos a trabajar por el sello de una buena convivencia, porque si tenemos eso nos va a ir bien y empezamos a tener respuestas positivas”. En esa línea, el Jefe Técnico concluyó que los resultados obtenidos en la pandemia “nos muestran que la incorporación de más estamentos al desarrollo de las actividades pedagógico curriculares genera más y mejores resultados, lo que termina validando el modelo”.